La vida y legado de Manuel Quesada Bastos (1878-1943) y Perfecta Alpízar Rodríguez (1893-1952)

Manuel Quesada Bastos nació el 16 de Junio de 1878 con el nombre de Juan Manuel de Jesús, fruto del matrimonio de José María Quesada Ugalde y Juana Bastos. Según registros parroquiales costarricenses los hermanos de Manuel fueron:

  • María Eloísa (1860-)
  • Florentino de Jesús (1862-)
  • María Victoria de Jesús (1864-)
  • María Josefa Perfecta de Jesús (1866-)
  • María de Jesús (1867-)
  • Ramona (1869-1921)
  • Baleria Mercedes de Jesús (1872-)
  • Soila Rosa de Jesús (1874-1874)
  • José María Nicolás de Jesús (1875-)
  • Victoria (1876-)
  • Rosa Victoria (1880-)
  • Rafael María de Jesús (1885-1980)
Figura 1. Perfecta Alpízar y Manuel Quesada Bastos en el día de su boda en 1912 (Quesada Alpízar 2015b).

Figura 1. Perfecta Alpízar y Manuel Quesada Bastos en el día de su boda en 1912 (Quesada Alpízar 2015b).

Su padre José María murió muy posible de fiebre amarilla en 1886 contraída en una de las tantas expediciones que los colonizadores de la zona norte de Costa Rica hacían desde Palmares. A José María junto con sus primos Baltazar y Joaquín Quesada Rodríguez y el señor Mercedes Quesada Quesada vecino de Grecia; se les atribuye la fundación del cantón de San Carlos en el año 1885 (MSC 2016).

Cuando el padre de Manuel murió en 1886, su madre Juana dejó Ciudad Quesada y se mudó a Chaparral con sus hijos con la ayuda de Baltazar, primo de su difunto esposo. Aunque Juana y José María parecía vivían originalmente en Palmares, no se tiene certeza la razón de mudarse a Chaparral después de la muerte de José María. En Chaparral, Juana tuvo la gran tarea de criar por su cuenta a sus hijos (Quesada Alpízar 2015). Juana y sus hijos junto con las familias de Rafael Solórzano y Mercedes Lobo, Eliseo Morera y Adelina Granados, e Isidoro Fallas eran los dueños de la mayoría de los terrenos en Chaparral y Calle Afuera. Rafael y Mercedes eran los dueños de la finca que iba al margen norte de la calle de Chaparral desde Calle Afuera hasta lo que hoy en día es la propiedad de Noe Solórzano Quesada. La familia de Isidoro Fallas era dueña de la finca que empezaba en la Prensa, siguiendo por el margen sur del camino a Chaparral hasta colindar con la propiedad de Juana Bastos en Chaparral (Fallas 2015 y Solórzano 2014).

Figura 2. Acta de matrimonio de Manuel Quesada Bastos y Perfecta Alpízar Rodríguez (IJSUD 2012)

Figura 2. Acta de matrimonio de Manuel Quesada Bastos y Perfecta Alpízar Rodríguez (IJSUD 2012)

Perfecta Alpízar Rodríguez nació el 15 de Setiembre de 1893 en San Ramón, hija de Eligio Alpízar y Vicenta Rodríguez. La familia de Eligio y Vicenta eran vecinos de San Juan de San Ramón. Manuel se casó con Perfecta el 4 de Noviembre de 1912 (IJSUD 2012). La Figura 1 muestra la fotografía del día de su matrimonio y la Figura 2 muestra el acta de matrimonio. Sus hijos fueron: Evencio, Manuel, Virginia, Francisca, Eulalia, Esmeralda, Isolina, Antonio, Felix, Rita, Augusto, Everardo, Emilce y Marta. De estos a Febrero 2016 aun viven Virginia y Rita (en San Juan de San Ramón) y Eulalia en San Carlos.

Figura 3. Recordatorio póstumo de Felix A. Quesada Alpízar (Quesada Alpízar 2015).

Figura 3. Recordatorio póstumo de Felix A. Quesada Alpízar (Quesada Alpízar 2015).

Las hijos de Manuel y Perfecta que ya fallecieron tuvieron una vida larga y buena, excepto por Felix que murió en un accidente a caballo. Según se cuenta, a Félix le gustaba mucho tomar licor y en una ocasión venía con su amigo Isaac Solórzano bien borrachos los dos y montados en el mismo caballo. Al pasar por la quebrada que está a 100 metros del cruce de Calle Afuera hacia Chaparral, el caballo brincó y Félix calló con tan mala suerte que el caballo pisó a Félix en la cabeza, ocasionándole la muerte (Quesada Ramírez 2011). La Figura 3 muestra una imagen de Félix que fue parte del recuerdo que se hizo para su funeral.

Manuel era conocido como un hombre de buen corazón. Amaba los caballos, la tierra, el ganado y sobretodo; le encantada comerciar. Casi todos los día iba a San Ramón a caballo desde Chaparral. Cuentan que a las 9 de la mañana mandaba a ensillar a su caballo favorito y no volvía hasta las 3 o 4 de la tarde (Quesada Ramírez 2015). El viaje de 7 kilómetros desde Chaparral hasta San Ramón lo hacía casi todos los días porque él sabía que tenía más posibilidad de hacer dinero comerciando que trabajando la tierra. Su rutina era comprar, vender, y cambiar. Vacas, caballos, terrenos y artículos novedosos como una máquina de coser que le regaló a una de sus nueras Gracielina Ramírez, esposa de Evencio (Quesada Ramírez 2012).

La vida de comerciante, lo llevó también a ser prestamista, razón por la cual recibió varias propiedades como garantía de pago. Manuel no prestaba dinero con el afán de ganar, sino de ayudar al que necesitaba y pedía su ayuda. En una ocasión el señor Mariano Carvajal le pidió ayuda a Manuel para pagar una deuda en el banco por 1000 colones. Como garantía, Mariano le dio a Manuel su finca de 100 manzanas que tenía en Bajo Chassoul con la condición que los dejará vivir y trabajar la finca hasta que el pudiera recuperarse y salir adelante. A base principalmente de la siembra de frijoles Mariano y su familia lograron crecer económicamente y lograron comprar un terreno en Quebradillas de Piedades Sur donde se fueron a vivir (Quesada Ramírez 2015). Uno de los nietos de Mariano Carvajal , hijo de Urbano, es Juan Vicente Carvajal, quién hoy en día es reconocido como uno de los ganaderos más importantes de Costa Rica. Hoy en día la finca de Mariano es propiedad de Jesús María Quesada, nieto de Manuel.

Anselmo Zumbado Vargas, cuñado de Manuel Quesada Bastos. 

Se dice que Manuel le tenía un cariño muy especial a la zona de Bajo Chassoul, Carrera Buena y Zapotal. Quizás fue porque una de sus hermanas, Ramona (1869-1821) vivía en Zapotal con su esposo Anselmo Zumbado Vargas y a Manuel le encantaba ir a visitarlos sin importar el viaje de 10 horas a caballo desde Chaparral. En una ocasión Manuel le prestó 4,000 mil colones a su cuñado Anselmo. Al término del plazo del préstamo Rafael no pudo pagar, así que le dio como garantía una finca de 100 manzanas que tenía en Carrera Buena (Quesada Ramírez 2015). Esta finca luego la heredó su hijo Manuel. La Figura 4 muestra a al cuñado Rafael Zumbado y un amigo de estos en Chaparral, muy probable en la primera mitad de 1930.

Figura 4. Manuel Quesada Bastos de pie posando con su cuñado Rafael Zumbado (jinete a la izquierda) y un desconocido. Foto tomada en la casa de Manuel y Perfecta en Chaparral muy probablemente en la primera mitad de la década de 1930 (Quesada Alpízar 2015).

Figura 4. Manuel Quesada Bastos de pie posando con su cuñado Anselmo Zumbado (jinete a la izquierda) y un desconocido. Foto tomada en la casa de Manuel y Perfecta en Chaparral muy probablemente en la primera mitad de la década de 1930 (Quesada Alpízar 2015).

A Manuel y Perfecta también se les conocía por ser una pareja aventurera y que les gustaba viajar. Uno de sus destinos favoritos era ir a San José en familia. La Figura 5 muestra a Manuel posando con su esposa Perfecta y algunos de sus hijos en uno de esos viajes a San José a mediados de la década de 1930. No se sabe en que lugar de San José esta fotografía fue tomada. En otra ocasión para celebrar el matrimonio de su hijo Evencio y su hija Marta (que se casaron el mismo día), Manuel invitó a las dos parejas de recién casados a un vuelo desde San Ramón hasta San José aprovechando que había una pista de aterrizaje por donde está hoy la Unión de San Rafael en San Ramón (Quesada Alpízar 2015).

Figura 5. Foto tomada en un paseo a San José. De izquierda a derecha: Marta, Augusto, Francisca, Manuel, Esmeralda, Perfecta, Isolina y Virginia. Se estima que fue tomada alrededor de 1935 (Quesada Alpízar 2015).

Figura 5. Foto tomada en un paseo a San José. De izquierda a derecha: Marta, Augusto, Francisca, Manuel, Esmeralda, Perfecta, Isolina y Virginia. Se estima que fue tomada alrededor de 1935 (Quesada Alpízar 2015).

Su amor por los caballos lo llevó también a participar en las muchas carreras de cintas que se hacían en los distritos de San Ramón. En algunas de estas carreras resultó ganador, como fue el caso de una carrera que participó el 24 de Junio de 1933 en el distrito de Santiago donde le entregaron una bufanda bordada a mano que se muestra en la Figura 6 (Quesada Alpízar 2015).

Manuel y Perfecta fueron personas con alto sentido de servicio al distrito y al cantón. A falta de un lugar para impartir lecciones, la casa de Manuel y Perfecta fue por muchos años la Escuela primaria de Chaparral y Calle Afuera. Manuel también sirvió también como representante electoral del distrito de Concepción para las elecciones presidenciales en 1909 del partido republicano. En esa época sólo las personas que sabían leer y escribir o tenían cierto nivel social o económico podían ejercer el derecho al voto. En los diferentes distritos se confeccionaba una lista de propietarios y estos votaban, lo cual se conocía como el sistema de votación de segundo grado según se estableció en la constitución de 1871 (CCRCR 1913).

Figura 6. Bufanda entregada a Manuel en una carrera de cintas organizada en el distrito de Santiago el 24 de Junio de 1933 (Quesada Alpízar 2015).

Figura 6. Bufanda entregada a Manuel en una carrera de cintas organizada en el distrito de Santiago el 24 de Junio de 1933 (Quesada Alpízar 2015).

Otro aspecto interesante sobre el sentido de servicio que tenían Manuel y Perfecta a la comunidad fue el préstamo y alquiler del trapiche de moler caña a los vecinos. En esos tiempos invertir en un trapiche era una inversión alta que muy pocos podían hacer. Manuel y Perfecta eran conscientes de este problema, así que prestaban el trapiche para que los vecinos de Chaparral y Calle Afuera pudieran moler su caña y obtener el preciado dulce tanto para consumo como para la venta. Según Fallas (2014) el trapiche funcionaba casi todos los días y era tanta la demanda que se tenía que moler muchas veces durante toda la noche para poder darle espacio a todos los demandantes del servicio.

Perfecta siempre estuvo atenta en ayudar y socorrer a las personas más necesitadas. En muchas ocasiones alimentaba a los niños que atendían la Escuela en su casa. Como el ejemplo de Ramón Fallas, quién era un niño delgado y con grandes ojos y que disfrutó muchas veces de las sopas de lecha que le daba Perfecta (Fallas 2014). En ocasiones también Perfecta recibía a los indígenas de la zona que vivían en ranchos ubicados detrás de la propiedad de los Rodríguez (Quesada Ramírez 2012).

Manuel tuvo una muerte muy trágica. Contrajo cáncer de próstata y sus últimos días fueron de mucho dolor según hay testimonios (Quesada Granados 2014). Murió el 18 de Abril de 1943 y fue enterrado en el cementerio de San Ramón. Curiosamente en su recuerdo funerario se anotó erróneamente Vásquez como su segundo apellido, ver Figura 7.

Figura 7. Recuerdo funerario de Manuel Quesada Bastos (Quesada Alpízar 2015).

Figura 7. Recuerdo funerario de Manuel Quesada Bastos (Quesada Alpízar 2015).

Después de la muerte de Manuel, Perfecta siguió luchando por tratar de mantener el orden y control de los bienes de la familia. Durante los primero años después de la partida de Manuel, los vecinos de Chaparral acordaron que se requería una salida alterna del caserío hacia el norte de manera que se pudiera acceder fácilmente al centro del distrito donde estaba la Iglesia. Esto requería que los dueños de los terrenos afectados por el trazado del nuevo camino donaron una parte para poder hacer el camino. Perfecta nunca estuvo de acuerdo con este camino ya que este le estaría partiendo la finca de Chaparral en dos, sin embargo el camino se hizo en contra de su voluntad (Quesada Ramírez 2012 y Quesada Alpízar 2015). Según parece esto la afectó mucho y a partir de este hecho su salud se fue desquebrajando poco a poco hasta que dio su último suspiro el 12 de Abril de 1952, ver Figura 8.

Figura 8. Recuerdo de la partida de Perfecta Alpízar Rodríguez (Quesada Alpízar 2015)

Figura 8. Recuerdo de la partida de Perfecta Alpízar Rodríguez (Quesada Alpízar 2015)

El legado de Manuel y Perfecta hoy está esparcido por todo Costa Rica y fuera de sus fronteras. Sus enseñanzas, el sentido de colaboración con los más necesitados, el amor por la familia, el respeto por la vida, y el servicio a la comunidad están aun hoy presentes en la vida del distrito.

Como un acto de reconocimiento a su legado y vida, la Escuela de Calle Afuera en Concepción lleva el nombre de Manuel gracias a la donación del terreno que hicieron sus hijos a finales de la década de 1940 (Quesada Fallas 2014).

Referencias

  • Congreso Constitucional de la República de Costa Rica (CCRCR). 1913.
  • La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (IJSUD). 2012. Búsqueda de Registros Históricos. Última visita Mayo 2012. Disponible en https://familysearch.org/search/
  • Fallas, Bernardo “Nano”. 2014. Entrevista.
  • Municipalidad de San Carlos (MSC). 2016. Reseña Histórica de San Carlos. Último acceso Febrero 2016. Disponible en http://www.munisc.go.cr/Paginas/Visitantes/Historia.aspx
  • Quesada Alpízar, Virginia. 2015. Entrevista.
  • Quesada Alpízar, Rita. 2015b. Entrevista.
  • Quesada Fallas, Joaquín. 2014. Entrevista.
  • Quesada Granados, Tulio. 2014. Entrevista
  • Quesada Ramírez, Jesús María. 2015. Entrevista
  • Quesada Ramírez, José Ramón. 2011. Entrevista.
  • Quesada Ramírez, Odilie. 2012. Entrevista.
  • Solórzano Morera, Edgar. 2014. Entrevista.