¡Tan lindo mi Conce!

¡Qué lindo que es mi Concepción! Entre más lugares y gente conozco, más arraigado y enamorado me siento del lugar que me vio crecer.  Sigamos haciendo de Conce un lugar cada día mejor.

prensa

Río La Prensa

Mantener una sonrisa no cuesta mucho, decir buenos días y saludar no es pedir mucho. Saludar con un apretón de manos, un simple “eso”, un grito o un beso en la mejilla son costumbres que nos hacen únicos. A pesar de las muchas presiones sociales y económicas que tiene mi Conce, está en cada uno de nosotros (los que vivimos o los que somos de aquí) en seguir creyendo y luchando por este hermoso lugar.

Los partidos de fútbol en la plaza, las misas de los Domingos, los rezos por nuestros difuntos, las caminatas a la escuela, los 15 años, las filas en el Ebais o las tertulias de las tardes son momentos ideales para compartir y valorar lo que tenemos. No descuidemos a Conce, no tiremos basura, no desaprovechemos el agua, no nos volvamos indiferentes ante las calamidades de los más necesitados.

Cuesta La Venada

Cuesta La Venada

Sigamos yendo a la poza de los Tubos, sigamos caminando la cuesta de la Venada, seguimos adornando el asfalto con flores y aserrín para darle paso a la inmaculada Concepción en su visita anual a San Ramón Nonnato, seguimos yendo al río Grande a ver sus piedras majestuosas, sigamos yendo a pescar mojarras espinudas y resbalosas al río La Prensa, regresemos al trapiche mientras aun existan, sigamos yendo a mejenguear y a jugar bingo en los turnos. Hay mucho que hacer y hay mucho que disfrutar.

Lo más lindo que tenemos es nuestra propia gente, nuestra familia, nuestros compinches de la Escuela. No perdamos la oportunidad de convivir y compartir recuerdos, historias de nuestros antepasados. No olvidemos lo que somos, los que llegaron aquí a fundar tan linda comunidad. Hay muchos ejemplos aun en nuestro querido Conce de gente de muchos valores, don de servicio y de gran corazón. No olvidemos a nuestros viejitos, hay que visitarlos, hablar con ellos, escucharlos, pedirles que nos cuenten historias, darles las gracias por lo que hicieron y nos heredaron.

Y lo digo de nuevo: Entre más ando, entre más lugares y gente conozco, más valoro y apreció mi Concepción.  Les digo de verdad, ¡Cuídenos a Conce! Está en nosotros, en cada vecino mantenerlo y hacerlo cada día mejor para que los que vienen lo pueden disfrutar también.